En el jardín
interior, las semillas germinan,
Pensamientos y sueños
que se iluminan,
Regando las flores con
mucha alegría,
Cuidando con amor, sin
mirar atrás.
Arrancando las malezas
del rencor,
Abonando la esperanza
y sembrando valores,
Protegiendo del frío
las plantas sensibles,
Que iluminen todos
esos seres invisibles.
Observando cómo
crecen los frutos del esfuerzo,
Probando la miel del
dulce momento,
Compartiendo la
abundancia de mi jardín,
Regalando sonrisas
con un buen gesto sentido.
Porque en el interior
reside la esencia,
En una conexión
profunda con nuestra existencia,
Ese espacio sagrado
para cultivar el ser,
Y florecer en
armonía, sin nada que temer.
Yo te guiaré continuamente, te
daré comida abundante en el desierto, daré fuerza a tu cuerpo y serás como un
jardín bien regado, como un manantial al que no le falta el agua.
Isaías 58:11
Muchas gracias por tomar parte de tu tiempo en leer esto en verdad que estoy muy contento, si te gusto déjame un comentario y ayúdame a compartirlo para que llegue a más personas que a ti no te cuesta nada y me ayudaría muchísimo.
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