En la muchedumbre,
risas que resuenan,
Manos que se alzan y
corazones que suenan,
Siendo un faro
brillante en la noche oscura,
Pero en mi muelle, la
sombra es mi aliada.
Dando calor a los
sueños ajenos,
Escuchando sus penas
y anhelos,
Mas al final del día
en mi rincón callado,
Mi voz se ahoga, mi lugar
olvidado.
Soy un refugio de
almas perdidas,
Un pilar firme en
tormentas vividas,
Pero en mi espejo,
solo hay reflejos,
De un corazón que
busca y necesita.
Pero así sigo en este
vaivén eterno,
Brindando atención en
un mundo total,
Estar para todos, un
don y un duelo,
En la soledad hallo
mi único consuelo.
Después el Señor le dijo a Noé: “Entre
toda la gente de este tiempo, sólo tú vives de acuerdo con mi voluntad. Por lo
tanto, entra en la barca junto con tu familia.
Génesis 7:1
Muchas gracias por tomar parte de tu tiempo en leer esto en verdad que estoy muy contento, si te gusto déjame un comentario y ayúdame a compartirlo para que llegue a más personas que a ti no te cuesta nada y me ayudaría muchísimo.
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